Colosenses 3, 12-17. Dar gracias a Dios y alabarlo no es una evasión de la realidad, sino un respiro de fortaleza espiritual necesario para vivir el presente con amor y paciencia.
Colosenses 3, 12-17. Dar gracias a Dios y alabarlo no es una evasión de la realidad, sino un respiro de fortaleza espiritual necesario para vivir el presente con amor y paciencia.